Volviendo atrás en el tiempo
Descubrí el candor de tus ojos
Negros que respiraban desbordando
Entusiasmo y alegría.
Aquellos ojos negro, grandes;
Como dos eclipses lunares
Que ciegan lo que divisan
A su alrededor,
Se volvieron minúsculos
Por el brillo de alguna luz
Que no dejaba ver
Con claridad.
Fue causa también, seguro;
Del segundo día que lloraron,
Tan tristes y angustiados;
Que ahogaron sus pestañas.
Fue causa también, seguro;
De no ver nunca tus ojos
Suficientemente brillantes
Como para oírte, mirándote.
19-Noviembre-1997
3 comentarios:
Estos ojillos entran
como ojazos y penetran
en ese espacio
donde la emocion
de amor se alimenta!
besos
Una muy bella y Riolizante poesía.
Un gusto leerte.
Saludos.
Romanos 10. Si confiesas con tu boca que Jesucristo es tu Señor y crees en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salv@.
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